El árbol pequeño de crecimiento lento, de la familia de las oleáceas que frecuentemente alcanza edad muy avanzada. Con la edad su tronco gris adquiere un aspecto nudoso y retorcido. Comienza a dar fruto cuando tiene varios años de edad y sólo lleva frutos en las ramas del año anterior.
Sus hojas lanceoladas, opuestas, enteras y de peciolo corto, son más bien coriáceas y de color verde obscuro y su envés plateado. Las flores, blancas, están reunidas en pequeños racimos axilares.
El fruto, es una drupa, primero verde y luego, cuando madura, de color purpúreo y negro.
El olivo de Génesis se identificó en el transcurso de los siglos con la especie Olea europea, habiendo caído en un completo olvido las especies propias de África, India, Australia y Polinesia.
Se conocen dos variaciones principales: oleaster y sativa.
El olivo doméstico se cultiva en gran escala en muchas regiones de la Península Ibérica, a excepción de su parte septentrional. Es uno de los elementos, a una con la vid, característicos de la vegetación mediterránea y su presencia propia del clima mediterraneo.