Es una planta sarmentosa, con los tallos alados y el fruto grande, de sabor ácido, que se da en los trópicos, en los que su cultivo es inferior al de la Granadilla Purpúrea. Su fruto, verde o amarillo verdoso, se emplea para hacer compotas, mermeladas, y vino, por fermentación del jugo. También se toma cocida como verdura, antes de que llegue a madurar.