Cualquier alubia que se consume antes de su madurez. Su nombre viene del color desvaído o 'pocho', que tiene su vaina en el momento de su recolección. El grano pasa de los tonos verdosos hasta el blanco que tiene en su sazón. Está considerada como verdura. 

Existe la variedad de 'arriñonada', autóctona de la huerta de La Rochapea de Pamplona y la de 'bolo' o redonda. La primera ha ido desapareciendo del mercado, ya que aunque la calidad es extraordinaria, su rendimiento es bajo, siendo en la actualidad muy difícil encontrarla a la venta.

La fécula de 'bolo' es originaria de Sangüesa, con mucha fécula, piel muy fina y tiene mayor rendimiento. 

Las pochas han dado lugar a otros platos que si bien son discutidos, son excelentes: las pochas con anguila tudelanas, las pochas con codornices, preparación de la cuenca de Pamplona, y las pochas con ranas de Tafalla.

 La temporada es relativamente corta, de finales de Julio (si el año es bueno) a finales de septiembre, si bien la huerta valenciana las produce 'como de Sangüesa' durante un periodo mayor.

 Su forma sencilla de cocinarlas, es desconocida por los tratadistas de fuera, que dan recetas barrocas y complicadas que nada tienen que ver con la autóctona. 

Es lamentable que una gran mayoría de restaurantes a nivel nacional, tenga en sus cartas por pochas, unas alubias que nada tienen que ver con esta verdura, durante todo el año.